Como tengo ganas de escribir pero aun tengo a medias la segunda parte del tutorial de estenopeica, me saco un offtopic de proporciones épicas y os pongo… unas croquetas. De pollo, ni más ni menos.
Las croquetas son gente compleja, no son dificiles de hacer y sus ingredientes son realmente inocentes pero hay que cogerlas el punto y exigen bastante trabajo. Y si te quedan como deben… te olvidas de las infames croquetas congeladas durante mucho tiempo.
A mi las recetas con proporciones calculadas y perfectas se me dan mal, porque acabo haciendo lo que me da la gana. Por tanto os dejo mi receta, estilo libre.
Empecemos.
INGREDIENTES
- Una cebolla pequeña
- Harina
- Leche
- Lo que le de el sabor a la croqueta, en este caso, restos de pollo asado
- Perejil
- Sal
- Pan rallado
- Aceite de oliva
- Picamos la cebolla y el pollo (o el jamón o lo que sea)
- Ponemos a calentar una sartén con el aceite y echamos la cebolla a rehogar a fuego lento hasta que se reblandezca un poco
- Añadimos el pollo a la sartén y damos vuelticas para que suelte sabor la cosa
- Cuando la cebolla y el pollo tengan buena pinta, añadir un puñado de harina. La cantidad de harina condicionará la cantidad de masa de croquetas que salga
- Removemos bien, quedará una especie de pasta seca asquerosa, no preocuparse
- Sin dejar que se pegue, vamos añadiendo leche y removemos para que se vaya incorporando. El punto de espesor de la bechamel es bastante subjetivo. Si la masa es muy seca las croquetas serán fáciles de hacer y aparte, serán una mierda considerable. Si es demasiado líquida, será imposible darlas formas sin destrozarlas. Mi pequeño truco personal es dejar de echar leche en el momento en el que deja de parecer una masa blanda y pasa a ser un líquido espeso.
- Añadimos un poco de perejil picado y sal al gusto.
- Dejar unos minutos a fuego lento, removiendo sin que se pegue. Ojo, los *blup* de la bechamel pueden ser peligrosos, sobre todo si la habeís dejado espesa, salta, quema mucho y se pega a la piel.
- Apartar del fuego y dejar que se enfrie
Esta es la primera parte, el hacimiento de la bechamel. Una vez se haya enfriado podemos retomar la receta.
- Batimos 2 huevos y preparamos un plato con pan rallado
- Cogemos un pegote de masa, le damos un poco de forma, se pasa por pan rallado, se afina un poco la forma, se pasa por el huevo y vuelta al pan rallado. Y ale, teneis para un rato con este punto.
- Y finalmente, ponemos aceite en la sarten y las freimos. Yo suelo echar como medio dedo de aceite, y las voy dando vuelta para que se doren por todas partes.
Y a comerlas antes de que se enfrien. Pero no os quemeis el morro, ojo.